Lara Pitarch es una joven artista nacida en Benicarló en 1999, cuya pasión por el arte se manifestó desde una edad temprana al crecer viendo trabajar a su padre el artista benicarlando Miguel Pitarch, de esta manera, Lara encontró en el arte una forma de expresión y exploración sin límites.
Graduada en Bellas Artes, Lara descubrió el potencial transformador del arte como vehículo para provocar emociones, cuestionar convenciones y explorar la complejidad del ser humano. Su enfoque artístico se centra en visibilizar la belleza de los cuerpos grandes, desafiando los estándares estéticos convencionales con obras audaces y provocativas.
Un Erasmus en una Italia en pandemia marcó profundamente su obra y su manera de entender el arte, agregando una capa adicional de profundidad y reflexión a su práctica creativa.
A través de dimensiones imponentes, campos de color vibrantes y figuras de gran tamaño que dominan y gobiernan el espacio, Lara crea obras crudas, sinceras y directas que obligan al espectador a mirarlas y a reflexionar sobre la realidad que presenta. Sus creaciones no solo desafían prejuicios arraigados, sino que también invitan a replantear el concepto mismo de belleza.
Lara baila entre lo figurativo y lo abstracto, usando ambos conceptos como medio para transmitir un potente y polémico mensaje, llegando al público tanto de manera directa como emocional.
Además de su dedicación al arte, Lara es graduada en el máster de Educación Secundaria. Esta faceta de su formación le permite compartir su pasión por el arte a las nuevas generaciones, transmitiendo no solo habilidades técnicas, sino también el poder del arte para inspirar, transformar y cuestionar.